“Sólo existe un templo en el mundo, y este es el cuerpo humano. Nada hay más sublime que esa figura erecta. El inclinarse delante de las personas es un homenaje a esa revelación
en el cuerpo”
Novalis
La pedagogía Waldorf
parte de un conocimiento basado en las leyes del movimiento del ser
humano, o sea que los niños no son educados como “pequeños adultos”, sino “de
acuerdo con su edad”. R.Steiner le encomienda la tarea al conde Bothmer, de
generar una nueva gimnasia, que no ignore el proceso infantil, a través de
ejercicios específicos “tallados para
cada edad”, gracias a estos ejercicios,
el ser humano en crecimiento se vuelve, paso a paso, consciente de la
fuerza de apoyo y de sustentación de su sistema óseo, de modo que, en el
espacio en que se encuentra y se mueve puede obtener firmeza y seguridad en la
vida.